Puede que me salga muy realista o puede que le invente algunas cositas, porque resulta que me lo contaron tantas veces que al final no estoy seguro si estuve o no.
La cosa es que habíamos estado tomándonos unos tragos pa conversar y reírnos un rato. Era temprano en la mañana y terminamos tomando cerveza en el campo de un amigo. Estabamos en el bosque y discutíamos de flora y otras yerbas de Chile, cuando la monarquia campesina hizo su entrada. Era un desfile militar y de modas al mismo tiempo las niñas y niños lucían sus mejores vestidos y bototos. La corte campesina bailaba rancheras y odiaba el reguetton. Un soldado analfabeto me dijo que se sentía más musulman que punk y nosé que cresta quizo decir con eso. La monarquía campesina era pobre, pero era la única monarquía de estas tierras, probablemente el único sueño realizado del continente. El resto, son los que pagan los impuestos, como tú o como yo, todos terminanamos pagando los impuestos a la monarquía campesina. Cuando pasaron frente nuestro, le ofrecimos cerveza y la aceptaron, bebieron un trago y se llevaron los vasos. El resto de cerveza se nos escurría de las manos y el sol comenzaba a pegar fuerte.
La cosa es que habíamos estado tomándonos unos tragos pa conversar y reírnos un rato. Era temprano en la mañana y terminamos tomando cerveza en el campo de un amigo. Estabamos en el bosque y discutíamos de flora y otras yerbas de Chile, cuando la monarquia campesina hizo su entrada. Era un desfile militar y de modas al mismo tiempo las niñas y niños lucían sus mejores vestidos y bototos. La corte campesina bailaba rancheras y odiaba el reguetton. Un soldado analfabeto me dijo que se sentía más musulman que punk y nosé que cresta quizo decir con eso. La monarquía campesina era pobre, pero era la única monarquía de estas tierras, probablemente el único sueño realizado del continente. El resto, son los que pagan los impuestos, como tú o como yo, todos terminanamos pagando los impuestos a la monarquía campesina. Cuando pasaron frente nuestro, le ofrecimos cerveza y la aceptaron, bebieron un trago y se llevaron los vasos. El resto de cerveza se nos escurría de las manos y el sol comenzaba a pegar fuerte.
1 comment:
terminamos cosechando con nuestras manos, el barro que nos alimentó la risa...
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